Con varios locales en Santiago, este restaurante de parrilladas resulta un lugar excelente para celebraciones, para almorzar en familia, en especial si se cuenta con niños. Esta era la segunda vez que nos dirigíamos a este lugar a celebrar el cumpleaños de un miembro de nuestra familia pues nos encantó su ambiente acogedor, rodeado por áreas verdes y juegos infantiles, además de personajes y animadoras para los niños. La atención es excelente, los mozos están preocupados constantemente de que no falte nada, pero sin caer en el pegotismo que no permite comer tranquilo. Cuentan con un menú muy completo con traducción al inglés y japonés, áreas para fumadores y no fumadores, además de mesas al aire libre.
Los precios son muy accesibles, y además cuentan con tipo combos, donde por un precio fijo se incluye la parrillada, ensaladas y postres, por lo que solo hace falta agregar los bebestibles.
En cuanto al aperitivo, tienen pisco sour chileno y peruano, para ser honesta el peruano no me gustó mucho, pues lo encontré bastante más dulce que el chileno, además que contaba con otra especie que mi paladar no pudo distinguir, creo que era canela.
También uno puede solicitar la tarjeta de cliente frecuente con la que puede optar a descuentos entre otros beneficios.
En resumen, un lugar cómodo, rico y económico para una gran celebración.
Los precios son muy accesibles, y además cuentan con tipo combos, donde por un precio fijo se incluye la parrillada, ensaladas y postres, por lo que solo hace falta agregar los bebestibles.
En cuanto al aperitivo, tienen pisco sour chileno y peruano, para ser honesta el peruano no me gustó mucho, pues lo encontré bastante más dulce que el chileno, además que contaba con otra especie que mi paladar no pudo distinguir, creo que era canela.
También uno puede solicitar la tarjeta de cliente frecuente con la que puede optar a descuentos entre otros beneficios.
En resumen, un lugar cómodo, rico y económico para una gran celebración.
